PLAZA DE TOROS DE RONDA
Como expuse en el anterior post sobre la arquitectura en la tauromaquia, hoy toca hablar de la Plaza de Toros de Ronda (Málaga), una joya arquitectónica y cultural dentro del país.
Debido al auge del toreo, la Real Maestranza de Caballería de Ronda (fundada en 1572 por Felipe II debido a las necesidades de defensa del territorio) levantó su famosa plaza, obra que se atribuye al arquitecto Martín de Aldehuela, quien construyó también el Puente Nuevo sobre el rio Tajo de Ronda.
La tradición taurina en Ronda era muy fuerte y en un principio las celebraciones de toreo se celebraban por el pueblo, específicamente en varias plazas como la Plaza Del Pozo o Plaza del Campillo. Pero, en esta particular región española no se dio el paso de la plaza al coso de madera, si no que directamente se decidió edificar la plaza de toros actual. La construcción de la plaza duró seis años, y fue inaugurada el 19 de mayo de 1785 con una corrida de toros en la que actuaron Pedro Romero y Pepe-Hillo. Y, aunque nos sorprenda, ésta no fue la primera actuación que se celebró en la plaza ya que durante su construcción se realizaron varias celebraciones y la primera feria esta datada del 11 de mayo de 1784. Como dato curioso histórico, me gustaría añadir que en 1810 este edificio fue ocupado por las tropas francesas para utilizarlo como cuartel, motivo por el cual en 1813 se decidió firmar un acuerdo para hacer obras en la plaza debido a que había quedado algo destrozada por los franceses.
La plaza se construye a las afueras de la ciudad, en un llano despejado. Puede considerarse el edificio existente más antiguo construido ex profeso para estos festejos, sin vinculación a viviendas o a edificios religiosos. Para la construcción de la plaza fueron muy importantes los ejes octogonales. La puerta principal estaba situada frente a la presidencia, sobre el eje del Puente Nuevo, en construcción, hasta el Palco Real y la puerta de chiqueros. La planta es circular, formando su estructura tres anillos concéntricos, siendo el exterior y el medio muros de piedra con mortero de barro y cal. El anillo interior, con un diámetro de 64,45 m, está formado por un pórtico continuo de arcos y considerado como el más amplio del mundo. En la parte más alta nos encontramos con una cubierta con tejado a dos aguas de teja árabe.
Concebida en piedra arenisca con un esquema monumental, la nobleza de su traza arquitectónica, con su doble galería de arcadas y la ausencia de tendidos al descubierto, tiene más espíritu de claustro que de recinto para espectáculos, y recuerda al patio circular del famoso palacio de Carlos V en la Alhambra de Granada, que en comparación al de la Maestranza, este si tiene una forma geométrica redonda.
Patio circular del palacio de Carlos V
Plano actual del recinto
El interior presenta una doble arquería superpuesta de piedra arenisca de tono amarillento que le da una textura y color peculiar. Esta arquería esta formada por arcos muy rebajados sostenidos por columnas toscanas. El segundo cuerpo es más bajo que el primero y con una barandilla de hierro forjado entre columnas. Los cuatro arcos correspondientes a los dos ejes principales son mayores que el resto, destacando el arco del Palco Real por su profusa decoración floral y sus columnas de tambores estriados. Coincidiendo con la vertical de cada columna, sobre la cornisa, presenta unos pináculos de piedra a modo de antorchas. Las gradas de la planta baja eran de madera de pinsapo, y la planta alta toda de palcos, sin gradas, recordando esta disposición a las plazas públicas preparadas para los festejos taurinos y a caballo. El primer cuerpo de columnas arranca sobre una base de pared de piedra, al modo de los anfiteatros, pero franqueadas con aberturas para acceder desde las gradas al ruedo. Podemos llegar a escuchar haciendo referencia a la arena su recuerdo al oro, como si de arena dorada se tratase.
La composición de la fachada exterior, en planta alta, era una sucesión de macizos y huecos con antepechos de barandilla. Contrasta el estado actual de carácter popular frente a la nobleza de la piedra interior, viendo en ello, algunos, la doble vertiente en las formas de la cultura taurina. La puerta principal se trasladó a su estado actual en la calle Virgen de la Paz, rompiendo el esquema del eje principal antes mencionado. Esta modificación se debió a la construcción del antiguo Teatro Vicente Espinel, hoy desaparecido.La puerta resulta de gran monumentalidad gracias a las dos grandes columnas toscanas que la delimitan y que sostienen el entablamento. En el centro del tímpano está el escudo de España del reinado de Carlos III.
En el siglo XX, una segunda dinastía de toreros rondeños, los Ordóñez, constituye otra aportación de Ronda a la historia de la Tauromaquia. Sus dos figuras fundamentales fueron Cayetano Ordóñez (1904-1961) y su hijo Antonio Ordóñez (1932-1998), que despertaron, por su manera de concebir el toreo, el interés de personalidades como el cineasta Orson Welles (al cuál pudimos ver en fotos tomadas en la Maestranza de Sevilla) y del escritor norteamericano Ernest Hemingway, a los que dedicó obras como Fiesta y Muerte en la tarde.
Fueron los Ordóñez los que inauguraron en 1954 la corrida goyesca de Ronda, con motivo de la celebración del II Centenario del nacimiento de Pedro Romero. Se trata de un festejo con el exorno, vestimenta y el aparato de los tiempos de Francisco de Goya (Hablando del magnifico Goya, os dejo aquí una noticia sobre una pintura ilustrada de una corrida en Ronda - NOTICIA). La corrida tiene lugar a principios de septiembre, coincidiendo con la más popular de las tres ferias que celebra Ronda, junto a una exhibición de carruajes y enganches.
Corrida goyesca
Teniendo en cuenta el exterior del edificio, nos encontramos también con varias estatuas que acompañan en la vista del edificio. Nos encontramos con un toro, y varios toreros como Cayetano Ordoñez.
Y con estas imágenes concluyo este post. ¡Pasad un buen día Martistas!
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